"La gente del viaje", exposición trae a Oaxaca vida de gitanos y nómadas de México y Europa
La exposición requirió al fotógrafo Lorenzo Armendáriz más de 25 años de andanzas con gitanos de México, Europa y América del Sur
Oaxaca de Juárez.– Siempre “tuve la inquietud, como todo mundo, y la fascinación por los gitanos, como mucha gente la tiene”, comenta el fotógrafo Lorenzo Armendáriz sobre su trabajo en la muestra 'La gente del viaje, gitanos sin fronteras', en el Centro Fotográfico Manuel Álvarez Bravo (CFMAB), en la ciudad de Oaxaca.
Originario de San Luis Potosí, Armendáriz ha documentado la vida de más de 40 grupos indígenas en México y Guatemala.
Su obra se refiere particularmente a las culturas y su cosmovisión, así como al tránsito de grupos nómadas y seminómadas, en el que el viaje no representa un desplazamiento, sino una forma de vida para existir o reafirmarse.
De visita por Oaxaca para la inauguración de su muestra, señala que cuando comenzó a documentar a los grupos gitanos, ya trabajaba como fotógrafo.
“Ya me había desarrollado en la profesión, primero trabajando en comunidades indígenas. Fui a hacer mi tesis a una comunidad maya tzeltal en Chiapas, llamada Tenejapa, ahí fue donde aprendí a hacer fotografía y decidí ser fotógrafo”, recuerda.
La inquietud por los pueblos gitanos, cuenta, germinó desde sus raíces: “Me enteré, ya mayor, que mi abuelo era gitano, a él le decían El húngaro, yo lo conocí cuando niño, porque no vivía con mi familia, vivía en un carro, y lo íbamos a visitar”.
Añade que las historias con su abuelo materno las vivía cada periodo de vacaciones. “Íbamos con mis hermanos, yo estaba muy chico, preguntábamos por el húngaro en los pueblos... era un tipo moreno, alto, es el recuerdo que yo tenía, ya después, investigando, me di cuenta de estas raíces”, señala.
En 1994, cuando trabajaba para el Instituto Nacional Indigenista (hoy INPI), propuso un proyecto para jóvenes creadores, que consistía precisamente en ir a buscar a la familia de su abuelo y documentar lo que estas personas recordaban de él.
Parte de su labor de entonces tenía que ver con documentar los cines ambulantes. “Me dieron una beca, me fui dos meses, primero a Europa. Fue un parteaguas. Muchas de esas fotos están aquí, sobre todo de Eslovaquia y de República Checa, son de ese momento”, resalta.
La exposición, disponible en la salas del CFMAB, muestra fotos que datan de 1995 y también del periodo entre 2006 y 2008.
“Las fotografías de Lorenzo Armendáriz dan cuenta de la vida de este pueblo fascinante, de su andar por el mundo. Indagando el origen de su abuelo, recorrió varios países de Europa y América Latina, compartiendo la cotidianidad de las comunidades gitanas en una intimidad que conjuga convivencia y fotografía”, escribe el curador de la exposición, César Carrillo.
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Su trabajo se ha expuesto en México, Estados Unidos, Canadá, Cuba, Colombia, Perú, Austria, Rumania, Finlandia, España, Italia, Francia, Bélgica, Portugal, Luxemburgo, Eslovaquia, Kenia, Hungría, Croacia, Polonia, Bulgaria, Turquía, Bosnia, Serbia y Montenegro.
Su obra se encuentra en colecciones como la Biblioteca Nacional de París; la Fototeca de Cuba; la Fundación Ronald Margolis, en Arizona; la Asociación Them Romano, en Laciano, Italia; la Fototeca del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH); el Centro de la Imagen, la Fototeca Nacho López de la CDI, ambas en la Ciudad de México, y en la Universidad Michoacana de San Nicolás de Hidalgo, en Morelia.
Lorenzo Armendáriz es miembro del Sistema Nacional de Creadores de Arte del Fondo Nacional para la Cultura y las Artes (Fonca) desde 2003.
Como parte de la labor fotográfica del potosino han nacido muestras como La Gente del Viaje, Los Senderos de la Fe, Los Guerreros del Desierto y El aliento de los santos.
La exposición que se exhibe ahora y hasta la primera semana de mayo de este 2022, en la capital del estado, requirió al fotógrafo más de 25 años de andanzas con gitanos de México, Europa y América del Sur.
Armendáriz también ha desarrollado su trabajo fotográfico en peregrinaciones y santuarios de la República Mexicana, donde ha experimentado con cámaras lomográficas (análogas) y estenopeicas (sin lente).
Entre sus trabajos destacados, está la documentación de los pastores nómadas de cabras y camellos en los desiertos mexicanos y el del Sahara Occidental, así como la cosmovisión de los mayas-tzeltales de Tenejapa, Chiapas, con quienes ha convivido por alrededor de 30 años.
