Volver a empezar, los migrantes que regresan a Oaxaca
Matrimonio vuelve para estar con su familia; reconocen haber perdido 62.5% de ingresos
La nostalgia y el arrepentimiento por dejar a su familia hizo volver a Oaxaca al matrimonio de Abelardo y Maritza, migrantes oaxaqueños, quienes desde la adolescencia viajaron a Estados Unidos por el sueño de una mejor vida.
Ella de 14 y él de 16 años salieron de San Juan Guelavía hacia territorio estadounidense anhelando una mejor economía, pero hoy, 20 años después, han regresado a su comunidad de origen con sus cuatro hijos.
Maritza perdió a su mamá, a quien ya no volvió a ver con vida nunca más. Lo mismo pasó con Abelardo, quien ya no vio a su padre porque murió hace un año; esta muerte generó en esta familia la decisión de regresar a su país y dejar toda una vida construida en Los Ángeles, California.
“Son más valientes los que se quedan que los que nos vamos, allá sí se vive mejor, es una vida mejor, lo difícil es que pierde uno más”, dice Abelardo Platas, de 41 años y quien vio a su familia por última vez hace 20 años.
Después de la muerte de su padre en 2017, decidió regresar, sin importarle empezar de cero, con el único fin de disfrutar la vida con su madre.
La misma historia se repite con su esposa Maritza, quien ya no volvió a ver a su madre, pues murió cinco años después de que se fue; hoy sólo vive su padre.
El matrimonio empezó a construir una nueva vida en los Valles Centrales, donde Abelardo de oficio soldador ha puesto su propio taller, sin importar que sus ingresos disminuyeron un 62.5%.
El hombre señala que en EU ganaba al día 200 dólares, que al mes eran más de 40 mil pesos, ahora en Oaxaca sus ingresos mensuales son de unos 15 mil pesos.
“Ahí vamos gracias a Dios, trabajo no falta, lo más importante es que estamos con la familia, con mi mamá, personas que no habíamos visto desde hace muchos años”, platica.
El mismo deseo de rehacer su vida en Oaxaca ha sido adquirido por su hijo Abelardo Jesús Platas Hernández, de 18 años, quien en Los Ángeles estaba por ingresar a la universidad cuando dejó el país. Pero, ahora cursa el quinto semestre del Colegio de Bachilleres del Estado de Oaxaca (Cobao) y su anhelo es compartir la vida con su abuela, hermanos y padres.
El joven es uno de los estudiantes que participó en el segundo concurso de ensayo sobre migraciones, fronteras y derechos humanos. Aunque cuenta con su doble nacionalidad, ya no desea volver a EU; su interés es quedarse en Oaxaca y estudiar una profesión. “Me gustaría ser un abogado, era mi sueño desde niño porque quiero proteger los derechos de las personas que viven en Oaxaca”, resalta.