Digitaliza España joyas bibliográficas del estado
El acervo histórico de la biblioteca Fray Francisco de Burgoa podrá ser consultado en micro sitio web.
El legado histórico que custodia la biblioteca "Fray Francisco de Burgoa", la más emblemática de Oaxaca, podrá ser consultado por cualquier lector del mundo a través de la biblioteca virtual de España Miguel de Cervantes.
Será por medio de un micrositio virtual que la biblioteca española difundirá obras que datan de los siglos XVI y XVII que sólo posee Oaxaca, explica David Karminski Katz, coordinador de la biblioteca De Burgoa, perteneciente a la Universidad Autónoma Benito Juárez de Oaxaca (UABJO).
Este espacio es muy emblemático debido a que se alberga en el ex convento de Santo Domingo de Guzmán, en el Centro Histórico de la ciudad de Oaxaca, y desde el año 1996 adoptó el nombre del fraile dominico Francisco de Burgoa.
La iniciativa de digitalización y difusión de las obras que guardan la memoria histórica de Oaxaca es parte del convenio firmado recientemente por el rector de la UABJO, Eduardo Bautista Martínez, y el director de la fundación de la biblioteca española Miguel de Cervantes, Manuel Bravo Lifante.
El material digitalizado es único y algunas obras datan el año 1484.
“Es un orgullo saber que una biblioteca tan grande como la de Miguel de Cervantes, que recibe casi 13 millones de visitantes al año, considere que este espacio tiene material qué aportar, significa que cualquier persona que cuente con un dispositivo conectado a internet puede ver materiales invaluables... y eso, para una biblioteca es el logro máximo”, expresa Karminski Katz.
La colección de la biblioteca De Burgoa comprende más de 30 mil títulos que datan desde los siglos XV al XX, en los cuales se incluyen obras que pertenecieron a las bibliotecas de los ex conventos de Oaxaca: Santo Domingo, San Agustín, El Carmen, San Francisco, La Compañía, La Merced y Santa Catalina; también de personajes, como del ex presidente Benito Juárez. El acervo está en los idiomas de español antiguo, latín, francés, italiano, mixteco, zapoteco y náhuatl.
De esta colección, se prevé una selección de 200 obras las que serán divulgadas a través de internet: “Subir aquellas obras que, por su antigüedad y valor histórico, por la importancia que tienen para la historia local, son más importantes”, refiere.
También se difundirán de forma digital los periódicos albergados del siglo XIX al XX.
“Todos hablan de Oaxaca, podemos ver desde la creación de la universidad, también vemos cómo fue cambiando el periodismo, en los primeros periódicos eran puro texto y ya para el año 1950 se incluyen fotografías, también cambia que la prensa después era más amarillista, luego de los años 50 ya se presenciaba la nota roja”, explica Jorge Bautista, responsable del departamento de digitalización de la biblioteca.
La Biblioteca de Burgoa guarda más de 30 mil títulos que datan de los siglos XV al XX.
Entre los diarios en el acervo destacan El Mercurio, Oaxaca en México, Oaxaca Gráfico y El Imparcial.
El proyecto comenzó en noviembre de 2014 y desde esa fecha han digitalizado unos 15 libros y 100 periódicos.
“No es ni 1% de digitalización de la biblioteca, pero tampoco podemos hacer una digitalización discriminada porque hay materiales que tienen otras bibliotecas y esos ya los tienen en un sitio web”, detalla Jorge Bautista. De acuerdo con el especialista, el material digitalizado hasta ahora es único y algunas obras datan del año 1484, además de biblias, y los periódicos que comprenden de 1870 hasta 1960.
Cada título podrá ser descargado en formato PDF y de forma gratuita a través del sitio web que se prevé esté listo a mediados de año. De esta manera, además de poner al alcance de todo el mundo las obras incunables, se espera que el acervo de la biblioteca De Burgoa pueda perdurar por más siglos.
El costo de la creación del sitio web será absorbido por la biblioteca española, como parte del convenio.
A la fecha, desde 2014, se han digitalizado unos 15 libros y 100 periódicos.
Algunos de los libros que forman parte de la colección llegaron de Europa a Veracruz, y de ese estado fueron trasladados hasta Oaxaca. El ejemplar más antiguo que posee fue impreso en 1472, en la ciudad de Padua.
Además de albergar obras de los ex conventos, también conserva el acervo del antiguo Instituto de Ciencias y Artes de Oaxaca, que es el antepasado de la UABJO.