"Edificios del Centro Histórico se levantaron pensando en una tierra que no deja de temblar"
Tras el reciente sismo, 41 inmuebles de la capital presentan daños; cinco de estos son históricos que resistieron bien aun con afectaciones por el de 2017
Enormes muros de cantera y adobe visten el centro de la capital oaxaqueña. Las calles que hablan de la historia de una ciudad conocida por su personalidad colonial descansaban obligadamente del bullicio de quienes las recorren a pie, ante las medidas sanitarias por la pandemia de Covid-19; la quietud se rompió por un intenso sismo que sacudió a Oaxaca y dejó pedazos de su historia en medio de la acera.
El Ayuntamiento de Oaxaca de Juárez, a través de la Subdirección de Protección Civil del municipio, informó que tras el terremoto de 7.4 grados, 41 inmuebles de esta capital resultaron dañados, de los cuales cinco son recintos históricos
Al respecto, la exdirectora de Centro Histórico y Patrimonio Edificado e integrante del Colegio de Arquitectos de Oaxaca, Mercedes Rizo Chongo, señaló que la ciudad resistió de buena manera el terremoto, aunque el censo de inmuebles dañados aún continúa.
“La capital del estado conserva mucha riqueza cultural en el ámbito de la arquitectura, que incluyen edificios históricos muy importantes, tanto del orden religioso como civil, ubicados en una superficie de 252 hectáreas, a las que se le conoce como Zona de Monumentos”, apuntó.
Foto: Mario Arturo Martínez
Este polígono está conformado por mil 602 inmuebles que integran la zona de monumentos y la zona de transición. Sólo 1% del total de las construcciones del lugar se considera como monumental, la arquitectura relevante ocupa 12%, la tradicional abarca 37% y la popular tiene 50%.
La especialista indica que la intensidad del sismo contribuyó a que los daños que estos inmuebles históricos ya tenían se acentuaran. Recordó que los sismos de 2017 ocasionaron más daños en el patrimonio histórico.
La resistencia de los inmuebles en la ciudad de Oaxaca y en otras zonas del estado con alta actividad sísmica, puntualizó, se debe a la experiencia de los constructores que por años se han enfrentado a terremotos: “La gente que construye sabe cómo construir, generacionalmente se ha transmitido el conocimiento para resolver la manera de vivir en un lugar donde tiembla constantemente y donde las viviendas tienen que responder al tipo de suelo y al clima de cada región”, resaltó Rizo Chongo.
Otras afectaciones
El informe preliminar de afectaciones señala que de los 41 inmuebles dañados, 28 son viviendas que se ubican en el Centro Histórico, así como en las agencias Trinidad de Viguera, Santa Rosa Panzacola, Montoya, San Juan Chapultepec, Candiani y Cinco Señores.
Además de los daños en domicilios, se afectaron bardas de adobe y cantera de edificios históricos que ya estaban en mal estado.
Foto: Mario Arturo Martínez
Asimismo, cuatro templos católicos se suman al saldo de daños materiales: el Templo de San José, la Parroquia de San Juan de Dios, la Parroquia de Nuestra Señora de la Merced y la Capellanía de la Trinidad de las Huertas, mismos que fueron acordonados, mientras que las autoridades dieron parte al Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH), el cual reportó que el sismo dejó daños en 101 inmuebles considerados con valor patrimonial en todo el estado, además, se cuantifican los daños en cinco zonas arqueológicas.
Por otro lado, las autoridades municipales acordonaron un inmueble en la calle Avenida Juárez, por daños en la fachada. Mientras que los mercados 20 de Noviembre, Benito Juárez, Sánchez Pascuas y La Merced también resultaron con afectaciones.
Grietas y fisuras fueron halladas en los muros del antiguo Palacio Federal, en inmediaciones de la Alameda de León: “A muchos de estos edificios se les han hecho acciones preventivas, aunque no se habían hecho en su totalidad tras los sismos de 2017”, precisó Rizo Chongo.
Una historia de daños
Tras la intensa actividad sísmica de 2017, el INAH y el Municipio de Oaxaca de Juárez informaron que en el centro histórico de la capital oaxaqueña más de 100 inmuebles quedaron afectados, al grado de ser de alto riesgo.
Sin embargo, en un censo realizado en 2013 Protección Civil municipal reportaba 314 inmuebles considerados históricos con daños y con base en esas cifras se iniciaron tareas de restauración en el marzo del 30 aniversario de la inscripción del Centro Histórico de la Ciudad de Oaxaca y la zona arqueológica de Monte Albán en la lista del Patrimonio Mundial de la UNESCO. No obstante, varios inmuebles no habían sido restaurados cuando se registró el terremoto de 2017.
Mercedes Rizo Chongo señaló que varios de los inmuebles que sufrieron daños no han recibido el tratamiento preventivo correspondiente para evitar su deterioro, lo que propicia que se derrumben poco a poco, debido al clima y constante actividad sísmica.
Foto: Mario Arturo Martínez
Explicó que los edificios históricos se han estado interviniendo de manera constante desde el terremoto de 2017, mientras que otros sólo estaban apuntalados.
La experta puntualizó que la restauración de los inmuebles históricos toma varios años, sobre todo si es por daños de sismos. “Es complejo hablar de intervenciones inmediatas, pues se requieren especialistas y vigilancia de los procesos.
Lo más problemático es el tema del recurso económico, pues son procedimientos costosos”, explicó.
Agregó que es el INAH el que tiene la injerencia respecto a la restauración de los inmuebles históricos y validan la licencia para intervenirlos.
Tierra en movimiento
Este miércoles, un sismo de 4.8 grados con epicentro en la Costa de Oaxaca sorprendió a comerciantes y trabajadores de edificios y locales ubicados en la capital de esta entidad, por lo que desalojaron los inmuebles, desplegándose en las calles del Centro.
De acuerdo con el Sismológico, el temblor se registró a las 14:54 horas de ayer y su epicentro fue a 28 kilómetros al Este de Puerto Escondido; sin embargo, fue reportado por el Sistema Sismológico Nacional 20 minutos después, a las 15 horas con 14 minutos.
Habitantes de la capital de Oaxaca señalaron que este nuevo movimiento sísmico se sintió con gran intensidad, por lo que se mantuvieron varios minutos afuera de los inmuebles, ante el miedo fresco en la memoria de tres temblores fuertes, y las réplicas del más reciente, que desde aquel 23 de junio suman más de 4 mil.
Foto: Mario Arturo Martínez