[email protected]

Borita y Telurio llenan sus manos con espuma de jabón que en segundos se convertirá en fuego. Las niñas, niños y adolescentes les aplauden y ríen al quedar impresionados del experimento.

Se trata de dos payasos peculiares que, a diferencia de los demás, fusionan la ciencia con la risa.

Desde 2014 en Oaxaca surgió esta iniciativa de los Payasos Científicos, quienes recorren las escuelas públicas del estado para que alumnos  comprendan el mundo natural y físico, así como la tecnología a través de experimentos y comedia. De esta forma,  Borita y Telurio comparten contenidos de Física, Química y Matemáticas.

“Profesionalizar la divulgación de la ciencia, con la parte de lo gracioso, es el principal objetivo”, explica Eduardo Roque Ángeles, coordinador del proyecto que   personifica a Telurio.

Este personaje, con una década de divertir al público, desde hace un año se integró a los Payasos Científicos, a fin de dejar un mensaje útil a los estudiantes.

“Me interesó mucho por el trabajo con los niños y me pareció buena la idea de llevar ciencia a los lugares donde no hay payasos. Ha sido muy gratificante”, narra.

En esta ocasión, la presentación fue para los estudiantes de la telesecundaria Benito Juárez, ubicada en Santa María Atzompa. Durante más de una hora, la explanada del plantel se convirtió en un laboratorio, donde los alumnos se divirtían y aprendían.

Alexis, de primer grado, reconoce que es la primera vez que aprende ciencia de una manera divertida. “Fue muy buena, me gusta mucho, los experimentos y todo lo que se puede hacer con la ciencia”, dice.

Payasos Científicos, una iniciativa impulsada por el Consejo Oaxaqueño de Ciencia, Tecnología e Innovación (Cocitei), integra a un equipo multidisciplinario de profesionales, uno de ellos es Verónica Santiago Vásquez, psicóloga, de 23 años, quien personifica a Borita. A ella la motiva el promover en el público el interés por el conocimiento científico.

 “El hecho de estar en un proyecto que ayude a divulgar la ciencia, a generar interés a los niños respecto a la educación, a la exploración con temas que no se conocen a fondo, es lo que me interesó”, refiere, aunque  reconoce que su labor le ha enseñado  a comprender la Física y la Química, y  le ha servido para detectar situaciones de intervención, en las que pueda asistir como psicóloga.

“Tengo más de tres años en el arte de payaso, ha sido una gran experiencia porque para mí es un gran aprendizaje”, expresa, pero también reconoce que en Oaxaca hace falta divulgar más la ciencia.

Los Payasos Científicos han recorrido escuelas públicas  de educación básica, medio superior y superior en las ocho regionesdel estado. En 2017 visitaron los albergues del Istmo  para practicar de una manera lúdica los experimentos científicos frente a los niños, que vivieron el terremoto del 7 de septiembre.

Recientemente, del  23 al 26 de mayo participaron en el Encuentro Internacional de Ciencia, Tecnología e Innovación celebrado en el estado de Yucatán.