A 2 años del sismo de la Costa, falta reubicar a 73 familias: Bienestar
Ademas, están pendientes de entregar apoyos a damnificados cuya vivienda tuvo daños menores
A dos años del sismo de 7.2 grados que golpeó a la región Costa de Oaxaca, el 16 de febrero de 2018, aún está pendiente la reubicación de 73 familias y la entrega de mil 146 apoyos a damnificados cuya vivienda resultó con daños menores, asegura la delegación de programas federales en la entidad.
De acuerdo con datos del gobierno federal, cuyos servidores de la Nación realizaron un censo en enero de 2019, el terremoto de la costa oaxaqueña dejó daños en mil 728 viviendas en los municipios de Santiago Jamiltepec y Santa María Huazolotitlán, los más afectados por el tercer sismo que golpeó a Oaxaca en un lapso de cinco meses, luego de los dos de septiembre de 2017.
De ellas, 103 casas se consideraron pérdida total, en 73 se determinó que debían ser reubicadas, 479 tuvieron afectaciones parciales y mil 146, daños menores. No todas las familias que las habitaban recibieron apoyos.
Según la delegación de programas federales en Oaxaca, encabezada por Nancy Ortiz Cabrera, desde 2018 la Secretaría de Desarrollo Territorial y Urbano (Sedatu) acordó que se responsabilizaría de las viviendas con daños totales y parciales, apoyos que entregó desde 2018; mientras que las autoridades estatales debían encargarse de los mil 146 daños menores y las 73 reubicaciones, recursos que hasta el día de hoy no se han entregado.
“Actualmente no se han pagado los daños menores ni las reubicaciones en ambas comunidades”, dice la delegación.
Según sus datos, en Jamiltepec son 625 damnificados que debían recibir apoyo porque su vivienda sufrió algún daño considerado menor y otros 29 debían ser reubicados. Mientras que en Huazolotitlán la cifra es de 451 con daños menores y otros 44 más están en espera de ser reubicados.
Lo que yo sé es que ya se está atendiendo el tema en la Costa, donde no acaban es en el Istmo
El pasado 16 de febrero, EL UNIVERSAL publicó que en municipios como Jamiltepec y Huazolotitlán, comunidad donde nació el sismo, los damnificados que perdieron su casa se levantaron y reconstruyeron por sus propios medios, en el mejor de los casos, o siguen esperando una ayuda que no llegó con el anterior gobierno federal ni con el nuevo.
Ejemplos de ello son las historias de Florentina Medino Gómez y María López Sánchez, ambas damnificadas censadas y habitantes de Huazolotitlán, donde fue el epicentro del terremoto.
Mientras que la primera construyó su casa con sus propias manos, con dinero que recibió de sus hermanos que trabajan en Estados Unidos; la segunda no ha podido ni demoler su fracturada vivienda por falta de dinero, ésta sigue acordonada con una cinta amarilla, sin techo ni ventanas.
1,728 viviendas dañadas se cuantificaron en Jamiltepec y Huazolotitlán.
Sobre ambas mujeres, la delegación federal reconoce que sus nombres no aparecen en la base de datos de damnificados, pero asegura que está “estableciendo comunicación con la Delegación Estatal de Programas para el Desarrollo en Oaxaca, para conocer las comunidades afectadas y ver la posibilidad que puedan ser atendidas, una vez que se publiquen las Reglas de Operación (RPO) del Programa Nacional de Reconstrucción”.
Al respecto, Nancy Ortiz reconoce que la reconstrucción “ha sido un tema de mucho trabajo, que debe coordinarse entre los tres niveles”. Dice que uno de los principales obstáculos es que “no hay un padrón real”, ni se tiene certeza de los que existen.